En el Distrito la división el trabajo remunerado entre ocupaciones masculinas y femeninas muestra una persistente desvalorización de las competencias de las mujeres y una continúa segregación ocupacional en el mercado laboral.

​

Mujeres con empleos poco calificados

Mujeres con empleos de menor remuneración

Mujeres con cargos de menor estatus ocupacional

La participación laboral de la mayoría de las mujeres no se realiza en la ciudad a través del trabajo decente. Hay una práctica de violación sistemática de los derechos laborales de las mujeres trabajadoras

La legislación laboral nacional y la normativa internacional sobre la materia se desconocen sistemáticamente, los mecanismos de control y vigilancia apenas se hacen presentes, y la precaria situación laboral de las mujeres no es motivo de preocupación para las autoridades distritales.

        El modelo de desarrollo económico y patriarcal de la ciudad promovido por las élites políticas y económicas es un modelo que subordina los derechos de las mujeres a los intereses económicos de los inversionistas y a las élites empresariales y financieras permitiendo la discriminación, la exclusión y la explotación de las mujeres en el trabajo. Dinámicas de desigualdad que se acentúan con la discriminación de clase y el racismo estructural etnico/racial que subyace en las relaciones sociales cartageneras.


        La desigualdad de género en el mundo del trabajo es un grave problema de la sociedad cartagenera que se traduce en una escandalosa precariedad, inseguridad y desprotección para las mujeres que no sólo afecta la vida laboral sino que se refleja en sobrecargas personales, acumulo de desventajas en el hogar y procesos destructivos para la salud y la vida de las mujeres cartageneras.

Acción Colectiva

Apoya:

​Cidesd   Opina

Por el Derecho al Trabajo Digno 

 de las Mujeres

sin discriminación !!

ni racismos !!